69 EL CLAVEL
lunes, octubre 30, 2006
lunes, octubre 23, 2006
¿Sabias que Charly García se lanzó desde un Noveno piso a una piscina?
¿Sabias que Charly García se lanzó desde un Noveno piso a una piscina?
A Charly lo conocí en Nueva York creo que en el año de 1981, él estaba sentado en un café de SOHO, para ser mas preciso en el Café Borgia, de la calle Thompson, tomándose un verdadero “Expresso” italiano.
Estaba solo y callado sentado a su mesa, hacía calor y era verano, yo lo reconocí por su bigote bitonal, lo saludé con un atrevido “Hola Charly, buenas tardes” al que me respondió, “Buenas tardes, venì a tomar un café conmigo pibe”.
Eso hice, me senté a su mesa por unos cortos instantes y pedí también un expresso, el cual tardó mucho en llegar mientras escuchaba historias de la lucha libre en Argentina y yo le contaba de la lucha y el “Catch As Catch Can” en Venezuela.
No hablamos de Rock and Roll, aunque parezca mentira ni un momento nos referimos a eso, solo hablamos de los enmascarados, de los rudos, de los técnicos y de las llaves…
Pronto lo vinieron a buscar en una limusina negra, se montó y se marchó con una sonrisa en el rostro... Nunca más lo volví a ver en vivo y hoy en día dudo mucho que se acuerde de mi, después de todo él es el divo y yo tan solo fui un fan mas, el cual ni siquiera le pidió un autógrafo.
Esto le decía yo en Buenos Aires, a mi amigo argentino Pablo Tartaglia del grupo de rock “Pájaro Inflamable”, cuando él me contó la mejor historia que había yo escuchado en los últimos tiempos.
¿Sabias que Charly se lanzó desde un noveno piso a una piscina?
Charly García voló veinte metros y cayó sobre el agua, él estaba en un hotel de la ciudad de Mendoza y de pronto zasssssss se lanzó.
¿Cuánto tiene la pileta?, gritó Charly García al salvavidas, desde la terraza del hotel Aconcagua… Tres metros de hondo señor García... contestó Lucas Rodríguez, nueve pisos más abajo, entonces nuestro querido amigo roquero se tiró sin escuchar el final de la frase del bañero con un clavado de 20 metros desde el noveno piso del hotel hasta donde estaba la piscina.
Eran las 12.30 del mediodía cuando subió a la terraza, con un traje de baño de color rojo, descalzo, la cara la tenía pintada con manchas blancas y rojas, el músico iba cargando dos muñecos, una repisa para CDs con una cabeza de gato siamés y un inflable del gato Silvestre, ese que siempre persigue al canario Piolín, amenazó a todos con saltar, pero antes probó con los muñecos, el gato siamés de madera golpeó el costado de la piscina y se desnucó, el inflable de Silvestre, sin embargo, cayó en el medio de la pileta.
No te tires Charly, gritó el salvavidas al músico.
Charly García se lanzó desde el noveno piso a la piscina y subió a la superficie como si nada hubiese pasado.
Me gusta tirarme, comentó García a los periodistas y definió su salto como clavadismo al mejor estilo de Acapulco.
El revuelo que armó su temeraria zambullida de indudable peligrosidad fue transmitida por la televisión una y otra vez en las primeras horas de la tarde, e hizo que muchos periodistas se congregasen a eso de las 6 de la tarde en el Aeroparque a la espera de su llegada, pero García se negó a dar declaraciones y se subió rápido a un taxi, que fue nuevamente rodeado por las cámaras.
Al llegar a su apartamento de Palermo lo esperaban más cámaras y mas periodistas, uno de ellos que trabaja para Azul TV lo interceptó y el roquero García le dio un puñetazo directo a la nariz dejándolo noqueado en el piso.
Después entró al edificio y comenzó a arrojar cosas desde su balcón, lanzó una maceta de flores y una mesita pequeña de madera que cayeron sobre un árbol, fue entonces cuando intervino la Policía quien evitó más problemas entre los periodistas y el célebre músico.
El roquero Charly García se lanzó desde un Noveno piso a una piscina y subió a la superficie como si nada hubiese pasado….
Esa era la noticia.
A Charly lo conocí en Nueva York creo que en el año de 1981, él estaba sentado en un café de SOHO, para ser mas preciso en el Café Borgia, de la calle Thompson, tomándose un verdadero “Expresso” italiano.
Estaba solo y callado sentado a su mesa, hacía calor y era verano, yo lo reconocí por su bigote bitonal, lo saludé con un atrevido “Hola Charly, buenas tardes” al que me respondió, “Buenas tardes, venì a tomar un café conmigo pibe”.
Eso hice, me senté a su mesa por unos cortos instantes y pedí también un expresso, el cual tardó mucho en llegar mientras escuchaba historias de la lucha libre en Argentina y yo le contaba de la lucha y el “Catch As Catch Can” en Venezuela.
No hablamos de Rock and Roll, aunque parezca mentira ni un momento nos referimos a eso, solo hablamos de los enmascarados, de los rudos, de los técnicos y de las llaves…
Pronto lo vinieron a buscar en una limusina negra, se montó y se marchó con una sonrisa en el rostro... Nunca más lo volví a ver en vivo y hoy en día dudo mucho que se acuerde de mi, después de todo él es el divo y yo tan solo fui un fan mas, el cual ni siquiera le pidió un autógrafo.
Esto le decía yo en Buenos Aires, a mi amigo argentino Pablo Tartaglia del grupo de rock “Pájaro Inflamable”, cuando él me contó la mejor historia que había yo escuchado en los últimos tiempos.
¿Sabias que Charly se lanzó desde un noveno piso a una piscina?
Charly García voló veinte metros y cayó sobre el agua, él estaba en un hotel de la ciudad de Mendoza y de pronto zasssssss se lanzó.
¿Cuánto tiene la pileta?, gritó Charly García al salvavidas, desde la terraza del hotel Aconcagua… Tres metros de hondo señor García... contestó Lucas Rodríguez, nueve pisos más abajo, entonces nuestro querido amigo roquero se tiró sin escuchar el final de la frase del bañero con un clavado de 20 metros desde el noveno piso del hotel hasta donde estaba la piscina.
Eran las 12.30 del mediodía cuando subió a la terraza, con un traje de baño de color rojo, descalzo, la cara la tenía pintada con manchas blancas y rojas, el músico iba cargando dos muñecos, una repisa para CDs con una cabeza de gato siamés y un inflable del gato Silvestre, ese que siempre persigue al canario Piolín, amenazó a todos con saltar, pero antes probó con los muñecos, el gato siamés de madera golpeó el costado de la piscina y se desnucó, el inflable de Silvestre, sin embargo, cayó en el medio de la pileta.
No te tires Charly, gritó el salvavidas al músico.
Charly García se lanzó desde el noveno piso a la piscina y subió a la superficie como si nada hubiese pasado.
Me gusta tirarme, comentó García a los periodistas y definió su salto como clavadismo al mejor estilo de Acapulco.
El revuelo que armó su temeraria zambullida de indudable peligrosidad fue transmitida por la televisión una y otra vez en las primeras horas de la tarde, e hizo que muchos periodistas se congregasen a eso de las 6 de la tarde en el Aeroparque a la espera de su llegada, pero García se negó a dar declaraciones y se subió rápido a un taxi, que fue nuevamente rodeado por las cámaras.
Al llegar a su apartamento de Palermo lo esperaban más cámaras y mas periodistas, uno de ellos que trabaja para Azul TV lo interceptó y el roquero García le dio un puñetazo directo a la nariz dejándolo noqueado en el piso.
Después entró al edificio y comenzó a arrojar cosas desde su balcón, lanzó una maceta de flores y una mesita pequeña de madera que cayeron sobre un árbol, fue entonces cuando intervino la Policía quien evitó más problemas entre los periodistas y el célebre músico.
El roquero Charly García se lanzó desde un Noveno piso a una piscina y subió a la superficie como si nada hubiese pasado….
Esa era la noticia.
jueves, octubre 19, 2006
Arte y naturaleza...
Arte y naturaleza...
El árbol da sombra como el cielo fe…
Himno al árbol.
Creo que fue en 1969 o en 1970, cuando iba manejando por una carretera en el Estado Aragua, en Maracay Venezuela; una carretera rodeada de árboles o mas bien una carretera que atravesaba un bosque, iba cruzando el parque Nacional Henry Pittier…
Iba a baja velocidad para así disfrutar del paisaje natural, sentir la brisa y oler la tierra húmeda, cuando de pronto sentí que una voz resonaba dentro de mi cabeza, de pronto sentí que alguien me llamó insistentemente y con mucha fuerza…
No llamándome por mi nombre sino dirigiéndose a mi telepáticamente…
Frené el automóvil y me bajé al camino, una fuerza enorme me hizo entonces penetrar el bosque, una fuerza descomunal me atraía hacia un árbol.
Cuando llegue a él, vi que un enorme clavo de hierro estaba clavado en su tronco; regresé al automóvil, busque un alicate y saqué el clavo del tronco del árbol…
Permanecí entonces un rato con el árbol, al instante me sentí en completa paz y deje e sentir la fuerza extraña que me atraía hacia el, sentí al árbol muy feliz.
Regresé entonces al carro y seguí mi camino con una tranquilidad y con una paz que hacia mucho tiempo que no experimentaba.
Desde ese día mi relación con los árboles es diferente, desde ese día yo a los árboles los respeto y se de su presencia viva.
lunes, octubre 16, 2006
Un árbol que retoña.
Un árbol que retoña.
Todos los domingos en la mañana, desde hace ya un año.
A eso de las 7.30 a.m. salgo de la casa con mi pequeño hijo de tres años de edad, llamado Sebastián, a caminar un poco y a comprar los diarios dominicales.
La rutina es la misma cada domingo, vamos a visitar “el árbol de espinas” un gigantesco árbol de “Jabillo” cuya corteza esta repleta de miles de espinas, luego caminamos sobre un muro de piedras y entonces visitamos el “árbol seco” lleno de agujeros en donde viven los pájaros carpinteros, ahí levanto a mi pequeño hijo por la cintura, para que alcance una rama seca y se agarre fuertemente a ella, se cuelga entonces de la rama y se mece, luego lo bajo y proseguimos hasta el puesto de venta de revistas y periódicos, compramos la prensa y un chocolate de leche para Sebastián y luego regresamos a el hogar, haciendo el recorrido a la inversa, primero el árbol seco, luego el caminar sobre el muro de piedras, pasamos al lado del árbol de espinas y de vuelta a casa a leer los periódicos.
Hace un año hacemos este recorrido, semana a semana, pero la “magia” ocurrió tan solo hace un mes… la rama seca, del árbol seco, en la que se trepa y columpia mi hijito Sebastián, ha revivido, poco a poco comenzó a retoñar y hoy esta completamente cubierta de hojas verdes, y el árbol otrora hecho leña, también se ha contagiado de la “VIDA” del niño, y ya comienza a volver a la vida, llenándose de retoños, ramas verdes y múltiples hojas, ahora vienen los periquitos caras sucias a vivir en los huecos abandonados por los carpinteros ¿Es esto un milagro?
Pienso que es la energía de la vida, que cual transfusión se la ha suministrado un travieso niño, ahora el árbol tiene una “razón” para vivir… un árbol seco y talado que hoy retoña… y que aun tiene la vida, como diría Joan Manuel Serrat.
Todos los domingos en la mañana, desde hace ya un año.
A eso de las 7.30 a.m. salgo de la casa con mi pequeño hijo de tres años de edad, llamado Sebastián, a caminar un poco y a comprar los diarios dominicales.
La rutina es la misma cada domingo, vamos a visitar “el árbol de espinas” un gigantesco árbol de “Jabillo” cuya corteza esta repleta de miles de espinas, luego caminamos sobre un muro de piedras y entonces visitamos el “árbol seco” lleno de agujeros en donde viven los pájaros carpinteros, ahí levanto a mi pequeño hijo por la cintura, para que alcance una rama seca y se agarre fuertemente a ella, se cuelga entonces de la rama y se mece, luego lo bajo y proseguimos hasta el puesto de venta de revistas y periódicos, compramos la prensa y un chocolate de leche para Sebastián y luego regresamos a el hogar, haciendo el recorrido a la inversa, primero el árbol seco, luego el caminar sobre el muro de piedras, pasamos al lado del árbol de espinas y de vuelta a casa a leer los periódicos.
Hace un año hacemos este recorrido, semana a semana, pero la “magia” ocurrió tan solo hace un mes… la rama seca, del árbol seco, en la que se trepa y columpia mi hijito Sebastián, ha revivido, poco a poco comenzó a retoñar y hoy esta completamente cubierta de hojas verdes, y el árbol otrora hecho leña, también se ha contagiado de la “VIDA” del niño, y ya comienza a volver a la vida, llenándose de retoños, ramas verdes y múltiples hojas, ahora vienen los periquitos caras sucias a vivir en los huecos abandonados por los carpinteros ¿Es esto un milagro?
Pienso que es la energía de la vida, que cual transfusión se la ha suministrado un travieso niño, ahora el árbol tiene una “razón” para vivir… un árbol seco y talado que hoy retoña… y que aun tiene la vida, como diría Joan Manuel Serrat.
Han pasado ya cinco años desde que escribí esta historia, hoy Sebastián está a punto de cumplir sus ocho años y hemos ido juntos a visitar el árbol seco… que hoy en día es un frondoso y bello amigo.
martes, octubre 10, 2006
MARCO ANTONIO ETTEDGUI… Desaparecido en Acción.
MARCO ANTONIO ETTEDGUI…
Desaparecido en Acción.
Este texto está dedicado a la memoria de uno de los más grandes artistas y hermanos Performancistas que he tenido; “Desaparecido en Acción” con la valentía de los bravos guerreros, pero presente siempre en espíritu, siempre conmigo en mi corazón.
Revindico de nuevo mi imagen de artista predilecto… MAE
Marco Antonio Ettedgui, celebraba su cumpleaños en los museos y en medio de una gran fiesta, con bambalinas, pastel y refrescos, cantando, doblando a Pedro Vargas y otras veces a Ima Sumac, otras veces hablaba de como fue exitosa una hospitalización por cálculo renal, del dolor que sentía y como expulsó el calculo por la orina, hablaba sobre estética con un carácter educativo, con un fin comunicativo, de creación y conciencia del arte y de la sociedad; se hacía promotor de eventos, se convertía en un animador cultural, en un gran maestro de ceremonias, luego escribía para la prensa nacional y para la revista “Entendido”, después reviviendo el mundo DADA, se presenta en el Museo de arte Contemporáneo repitiendo poemas al estilo de Tristan Tzara, se bañaba en una tina en público, se desnudaba, se cepillaba los dientes, se ponía una bandera nacional cual minifalda, rompía galletas y botellas, escribía "arteinformaciones" y con una gorra de militar, se desnudaba en un balcón mientras cantaba una merengue popular… Cuantas cosas hacía Marco Antonio, todas sencillas, cotidianas pero elevadas con su magia y encanto a un punto maravilloso.
En sus Performances el Ettedgui trataba los problemas personales como una obra de arte, hablaba de la soledad o de la enfermedad, trataba los problemas de la ciudad con su infernal tráfico así como también de la neurosis colectiva y aportaba casi como un embajador cultural, una solución para los problemas limítrofes entre Venezuela y Colombia.
Él decía: “Entiendo perfectamente la ansiedad o la nueva esperanza de Claudio Perna por asociar sus valores concebidos con el periodo histórico, comprendo el insomnio e Vivas Arias buscando arte por los callejones de las urbes, interpreto las recientes entrevistas de Margarita D´Amico a científicos y su serie de artículos asesinantes contra algunos de nosotros, acepto que Diego Barboza me comente en un Pent House de Parque Central que su arte son mariqueras, adoro los intentos de reformación jurídica de mi amigo Wenemoser y admito los intentos destrozantes de Peña y a nuestro violento Carlos Zerpa utilizando nuestros cánones religiosos y políticos para echárnoslos en cara.
¿Es que a nadie le interesa tener una camisa o una prenda interior de Ettedgui o un poco del agua que el artista tomó en el evento?
A mi me gustaría enormemente tener en mi casa un poco del aire que respira Wenemoser, o unos cabellos de Perna, o un hipo de Espinoza, o un trozo de tacón de Yeni o Nan o Elda Cerrato, o un papel que Bélgica Rodríguez arrojó al suelo, o un poco del temperamento de Fuenmayor, o un pelo de Terán, o una gracia de Montero Castro, o sudor de Zerpa… De verdad me gustaría. Si tuviera esa oportunidad de conquistar esa estrategia artística, con ella incluyo que se valoricen sus obras, que pueda revenderlas, que la historia las documente”.
Recuerdo que en el Performance “Acto de Inauguración”, presentado por Marco Antonio Ettedgui, en la inauguración de una exposición de ensamblajes, instalaciones y Performances mía, titulada: “Cada cual con su santo propio” que realizamos en la planta alta de la galería “Contracorriente” en el mes de Marzo de 1981, MAE se desnudó poco a poco casi haciendo un “strip tease” en lo alto de una escalera, justo en el balcón que daba a la calle, la gente se aglomeraba sorprendida para verlo, se desnudaba lentamente, se ponía luego una gorra militar y pronunciaba un discurso iconoclasta en donde manifiestaba su desilusión ante la ineficacia del arte y anunciaba su retiro del mismo… luego comenzaba a ser un militar amanerado, un militar maricón que cantaba una merengue popular con aquello de: “La marina tiene un barco, la aviación tiene un avión, van pasando los cadetes en perfecta formación… unos son de la marina otros son de la aviacioooooón!!!!!!” la gente se ponía nerviosa, temiendo que se diera una “redada policial” y verifican si han traído su “cedula” su carnet de identidad… hay regocijo y mucho temor en la audiencia, saben que en cualquier momento todos podríamos terminar presos esa noche, por mi parte yo sonreía en complicidad con Marcos… El cometido del Performance se había logrado.
Marco Antonio dijo al terminar: “Este es mi ultima propuesta como Performancista, con este Acto de inauguración para mi amigo Carlos Zerpa he determinado que no quiero hacer mas arte hasta nuevo aviso, y realmente no quiero hacerlo más por ahora. Soy un humano y no pienso presionarme para cumplir con la exigencia virtual de ser artista, para mi es inútil ahora y me respeto”.
Esto para mí es un terremoto (decía MAE) y esta toma de objetivos y subjetivos del arte es una refrescura después de la aridez, como me decía mi amigo Barboza: una conciencia particular de la situación exterior.
Marcos estaba convencido que su arte no estaba decidido por las premisas del “yo” si no del “tú” y que el “yo” quedaba tan solo para el arte de los setenta… “Revindico de nuevo mi imagen de artista predilecto; no se me compra, pero si se me disfruta por un método de visualización similar al que se usa cuando se lee una revista pornográfica”.
Le comenté al Ettedgui en ese momento que al igual que a nuestro común amigo Diego Barboza, estaba yo también muy influenciado para mis próximos trabajos por sus Performances, en especial por el realizado en “Acciones frente a la Plaza” titulado, “Hospitalización por calculo renal” y que ese era el camino que yo iba a seguir para presentar mi próximo trabajo, él me respondió con una sonrisa en los labios ”Algo queda”… y en verdad, poco después de ese encuentro comencé a incluir en mis Performances ciertos elementos muy Ettedguianos, como cantar en público y hasta bailar.
"Los novísimos venezolanos somos los artistas más preparados para subsistir en medios agresivos desde Michelangelo", Nos decía Marco Antonio en su Peformance "Post-Punkake", que realizó para la serie “Informacional Arteología”, basada en el cuerpo como pieza de arte viviendo en un mundo amenazado por la guerra nuclear… Luego de este Performance sería enfático al pronunciarse: "la realidad del concepto es total, es la verdad del cuerpo. Si nos herimos en un escenario, nos herimos de verdad, que corra la sangre, morir"… Esta toma de conciencia en realidad es muy importante partiendo de un artista que venía del teatro y que hacía teatro, el entender plenamente que el Performance NO era teatro y que si se tiene que vomitar pues se vomita de verdad, si se tiene que sangrar pues se corta y se sangra, que jamás utilizaría ketchup como sangre y que si tenía que beber hasta emborracharse pues lo haría, que jamás tomaría agua con un toque de café para que pareciera Whisky o Koolaid de uva como si se tratara de vino tinto, para hacer parecer que ingería bebidas alcohólicas y luego fingiría su ebriedad, porque no se trataba de fingir ni de hacer teatro.
Quedó pendiente con Marco Antonio un Performance que íbamos a hacer juntos, quedo sin hacerse por la llegada repentina de su muerte, por culpa de ese accidente que le costaría la vida en plena actuación con sus compañeros de “Autoteatro”. Quedó en el limbo un trabajo que íbamos a hacer juntos, que íbamos a realizar Marcos y yo, en donde los dos haríamos un Performance “mano a mano”, una especie de collage conceptual, de un collage Performancistico, en donde incluiríamos cosas de nuestros compañeros de “ACCION”, con mucho humor negro pero a la vez con mucho respeto hacia nuestros compañeros utilizaríamos detalles de los Performances de Nan y Jenny y su acción divisoria del espacio, de Pedro Terán y su chaman dorado, de Alfred Wenemoser y su Ida Pingala, de Diego Barboza y sus chicas con redes, de Claudio Perna como atril, de Diego Risquez y su Miranda en la Carraca, de Antonieta Sosa y su trabajo con vidrios quebrados, de Héctor Fuenmayor y su Cruz y Ficción y de Ángel Vivas Arias y sus gárgaras de pintura amarilla… ya lo teníamos planeado con MUCHÍSIIIIIIIIIIIMO HUMOR y de seguro lo íbamos a presentar en el jardín principal de la Galería de Arte Nacional…Ya Marco Antonio en su texto “Recuerdo de Infancia” (MAE arte-información para la comunidad, Ediciones Oxígeno, 1985 por Alejandro Varderi) hacia un listado en donde comenzaba a incluir partes de esta idea, el la escribiría en su esquema:
1- Padres haciendo el amor.
2- El muchacho sale del agua y se acuesta en la arena.
3- El maestro asesina al niño que está cuidando la biblioteca para robar un texto.
4- La mamá de la familia asesina a la madre desnuda para robar otro texto. Cansado, llega a su cuarto.
5- Enciende la TV con un video de Carlos Zerpa
6- Se viste, se acuesta en la cama, el joven esta allí, pero no lo siente…
Edttegui es quien se ocupaba de entrevistar a los artistas del Performance al inicio de los 80s, estas entrevistas y notas de prensa publicadas en su columna del Diario El universal, son el trabajo de un comunicador que no solo siente un interés por estas propuestas sino que está dentro de ellas, que es coparticipe.
Marco Antonio resultó mortalmente herido accidentalmente en la sala Rajatabla, mientras se presentaba, una barra de hierro olvidada dentro del cañón del fusil fue disparada por una compañera hacia su persona, esta atravesaría su corazón, un disparo de ficción que en realidad lo alcanzó fatalmente, los espectadores estaban fascinados por los efectos especiales, por la actuación magistral y el grito de dolor del Performancista, mientras sus compañeros entendían perfectamente que no se trataba de teatro, si no que el fatídico accidente en verdad había ocurrido, MAE fue llevado de emergencia al Hospital Universitario de Caracas en donde falleció once días después cuando tenia apenas 22 años de edad…En el año 1981.
Este fue su último Performance.
Sirvan estas líneas para recordarlo y rendirle un pequeño pero sentido homenaje a un hermano a quien en verdad quise y continúo queriendo mucho.
sábado, octubre 07, 2006
miércoles, octubre 04, 2006
Una serpiente venenosa cruzó delante de mí.
Una serpiente venenosa cruzó delante de mí.
Una serpiente venenosa cruzó delante de mí.
Ayer me fui a tomar un café con mi amigo Santos López, fui a hablar con él y a contarle que una serpiente venenosa cruzó delante de mí…
No un gato negro ni un patito feo, fue una serpiente “Mapanare”
Esto sucedió en Tucacas
Una culebra Mapanare de un metro de largo…
Yo no me asusté
Santos dice que es un aviso, que tenga cuidado.
La serpiente es sabiduría, pero también es el mal y lo femenino.
Cuidado – Atento – Ojo – Alerta – Mosca - Beware
Santos dice que eso es buenísimo
Pues ella no me atacó, si no que solo pasó delante de mi…
Lo bueno fue que no me asusté…
Ella no me atacó ni se paró delante de mí.
Eso hubiese sido una alerta máxima, una alerta roja bueno en realidad no es nada común que esto suceda,
Pues no fue una mariposa ni un patito feo….
Fue una culebra Mapanare de un metro de largo…
Yo la vi pasar, le avise a unos guardias y una mujer fue quien la mató,
Le dio un palo por la cabeza…
Lo femenino me liberó…
Que vivan las mujeres,
Amo a las mujeres.
Una serpiente venenosa cruzó delante de mí.
Ayer me fui a tomar un café con mi amigo Santos López, fui a hablar con él y a contarle que una serpiente venenosa cruzó delante de mí…
No un gato negro ni un patito feo, fue una serpiente “Mapanare”
Esto sucedió en Tucacas
Una culebra Mapanare de un metro de largo…
Yo no me asusté
Santos dice que es un aviso, que tenga cuidado.
La serpiente es sabiduría, pero también es el mal y lo femenino.
Cuidado – Atento – Ojo – Alerta – Mosca - Beware
Santos dice que eso es buenísimo
Pues ella no me atacó, si no que solo pasó delante de mi…
Lo bueno fue que no me asusté…
Ella no me atacó ni se paró delante de mí.
Eso hubiese sido una alerta máxima, una alerta roja bueno en realidad no es nada común que esto suceda,
Pues no fue una mariposa ni un patito feo….
Fue una culebra Mapanare de un metro de largo…
Yo la vi pasar, le avise a unos guardias y una mujer fue quien la mató,
Le dio un palo por la cabeza…
Lo femenino me liberó…
Que vivan las mujeres,
Amo a las mujeres.