"Cuando La Lucha Libre Era De Verdad Verdad"...
Narraciones Contenidas En Un Libro
Carlos Zerpa presenta con crónicas y ficciones la historia
del luchador El Dragón Chino
ESTEBAN YEPES
Con un libro anecdotario y testimonial, el artista aborda
episodios de vida y combates de este y otros que fueron héroes de la infancia
de muchos venezolanos por los años 1960 y 1970. Este sábado 13 lo presenta en
la Librería Kalathos, a las 11:00 am
Un aficionado de la lucha libre sostuvo un fructuoso
encuentro en Valencia hace nueve años con el artista plástico Carlos Zerpa, a
quien mostró y confesó secretos escondidos entre cartones de los protagonistas
de la lucha libre Catch as Catch Can de los años sesenta, con máscaras,
afiches, folletos de programas de combates y recortes de prensa.
Zerpa hizo un inventario de cuanto atesoró Wladimir
Havriluk, amigo incondicional y mano derecha del legendario luchador el Dragón
Chino, y comenzó a escribir líneas y páginas, y a reproducir testimonios y
materiales gráficos, hasta construir la historia del combatiente del
cuadrilátero, en suerte de literatura fantástica sobre la biografía de un héroe
encapuchado de la infancia de muchos venezolanos, con el libro que titula El
Dragón Chino. Cuando la lucha libre era de verdad verdad.
Para el autor, el libro que presentará este sábado es
crónica pero también literatura
“Mi nombre de hombre civil ya no interesa, ¿a quién importa
cómo me llamo? Algunos dicen que mi nombre es Jorge, otros dicen que me llamo
Carlos y otros Ling. Mi verdadero rostro es el de esta máscara, este es mi
verdadero semblante, me llamo el Dragón Chino y todos al verme comienzan a
temblar, pues soy malo, rudo y el mejor sobre el entarimado”, es uno de los
testimonios que rescató Zerpa y que estampa en un impreso sobre cartón y papel,
cocidos entre sí como para aguantar embates sobre un ring de lucha, libro que
este sábado presentará en la librería Kalathos en Los Galpones de Los Chorros
en Caracas.
El autor explica esta historia: “Es sobre el Dragón Chino,
para ponerlo a la altura de un héroe, así como lo es El Santo para los
mexicanos… Siempre con su máscara, nunca digo su nombre sin máscara, y verán al
Dragón Chino como el gran luchador que fue, con sus luchas con los grandes y de
cómo les ganaba. Es una historia con su toque de realismo mágico, para
engrandecer al personaje. A la vez hablo del entorno del país, del Catch as
Catch Can de la época de oro de la lucha libre entre los años 60 y 70”.
Para el artista Zerpa, el Dragón Chino fue un héroe
encapuchado de la infancia de muchos venezolanos
El autor invita a este encuentro único en Los Galpones para
compartir relatos anecdotarios sobre el maniqueísmo en el cuadrilátero de
lucha, con los buenos y malos-rudos, los sucios y limpios, los enmascarados y
encapados de quienes al conocerse sus identidades escondidas –las máscaras
quitadas y las cabelleras rapadas– constituyeron deshonores, y sus gritos de
guerra fantasmagóricos.
Entre crónicas, imaginaciones, ficciones y literatura, su
autor revela que en el libro se reúnen historias de grandes entre los grandes
de la lucha libre, como Bassil Battah, El Gran Lotario, El Gorila con la dama
de las cadenas, El Gran Jacobo, El Tigrito del Ring, El Dr. Nelson, Henny Awed,
Dark Buffalo, El Chiclayano, Bernardino La Marca, El Gladiador Croata, El
Guanche Canario, el Médico Asesino y Santo el Enmascarado de Plata, entre
muchos otros.
Confiesa que la obra la escribió para sacar al Dragón Chino
de lo que califica de un injustificado olvido. “Siempre lo mostraré con su
máscara –y nunca diré su nombre sin ella– en sus luchas con sus grandes
oponentes, contaré sus emocionantes y las divertidas anécdotas… para ponerlo a
la altura de un héroe, así como lo es El Santo para los mexicanos… verán al
Dragón Chino como el gran luchador que fue, con sus luchas con los grandes y de
cómo les ganaba. Es una historia con su toque de realismo mágico, para
engrandecer al personaje. Es crónica, pero también literatura”, expresa.
Añade que a la vez aborda el entorno del país, del Catch as
Catch Can de la época de oro de la lucha libre, entre los años 1960 y 1970, y
de los luchadores... para sacarlos del olvido. Y hace un alto en esta historia
para comentar que a la sazón en su período presidencial, Rafael Caldera fue un
inquisidor de la lucha libre. “Cuántas equivocaciones las de este doctor Rafael
Caldera, tan soberbio, tan arrogante, tan puritano y a la vez tan altanero y
estúpido”, revela al referirse a las consecuencias de sus decisiones en dos
períodos de gobierno.
Zerpa, quien es pintor autodidacta, revela que hace nueve
años, el 5 de octubre de 2009, por Facebook publicó: “Estoy escribiendo un
texto sobre el luchador Dragón Chino y me he entrevistado con el que le hacía
las máscaras. El Dragón Chino era arrechísimo y adelantadísimo para su época.
He estado viendo recortes, avisos y hablando con luchadores. Nueve años después
haré la presentación del libro en la Librería Kalathos, el sábado 13 de octubre
a las 11:00 am, corregido por Fedosy Santaella, diseñado por Juan Mercerón e
impreso por Gráficas Acea”.